El valor de pH de un medio es muy importante, pero también uno de los factores más comúnmente malinterpretados.
Una planta transporta elementos a través del agua. Por lo tanto, es esencial que los elementos estén disponibles para una absorción óptima, lo cual depende del valor de pH del medio.
Por ejemplo, si el pH en la zona radicular es demasiado alto, elementos como el fósforo, manganeso y boro se absorben con mucha menos eficiencia.
Esto conduce a deficiencias a largo plazo de estos elementos y puede causar quemaduras en las hojas debido al exceso en el medio. Con cada riego, estos elementos se añaden nuevamente sin ser absorbidos, lo que provoca acumulación.
Si el pH es demasiado bajo, la absorción óptima de todos los elementos tampoco es posible, lo que lleva a deficiencias similares y síntomas de "quemaduras en las hojas".

El mejor pH para casi cualquier medio se encuentra entre 5,0 y 6,2.
Esto no aplica para la fibra de coco como medio.
En coco, si el pH está por debajo de 5,4, las fibras retienen cobre y no lo liberan a las raíces de la planta.
Medición del pH
El pH debe medirse en el propio medio, no en el recipiente ni en el agua de drenaje.
En sistemas hidropónicos o NFT, el pH se mide mejor extrayendo una pequeña cantidad de agua del medio con una jeringa y probándola.
Para medios de suelo o coco, use un medidor especializado (electrónico) de pH para suelos. Si no tiene uno, tome una muestra húmeda aproximadamente media hora después del riego, apriétela ligeramente en su mano e inserte el medidor de pH. Esto libera suficiente humedad para una lectura precisa.
El pH depende de la capacidad de amortiguación del medio y del agua (contenido de bicarbonato). Si el tampón está completamente lleno o vacío, el pH puede cambiar rápidamente hacia arriba o hacia abajo.
Muchos problemas con el pH bajo pueden corregirse fácilmente añadiendo nuevos elementos amortiguadores al medio.
Cuando el suelo o coco se trata adecuadamente con fertilizante de calidad y un buen tampón, el medio puede durar años.
